Es fácil decirlo, ¿pero hacerlo? Conseguir una sonrisa perfecta es el objetivo de muchísimas personas, ya sea por temas de salud, estética, comodidad o gusto personal. Pero una cosa tenemos que saber. Por norma general, alcanzar esta meta nos va a llevar tiempo, paciencia, esfuerzo, dedicación y pasar por una serie de tratamientos concretos. 

El hecho de lucir una sonrisa perfecta implica muchas cosas, desde una mordida adecuada hasta una buena alineación o tonalidad de nuestros dientes y encías. De hecho, una sonrisa perfecta nos ofrece una serie de beneficios para nuestro día a día más allá de la estética. 

Si no lo sabes, una sonrisa perfecta es sinónimo de salud bucodental, ya que nos ayuda en la masticación, deglución, digestión y respiración. Del mismo modo, también generará menos tensión en la mandíbula y en los músculos de nuestra cara y cuello. En esta línea, también influirá en no padecer molestias o dolor al morder, mejorando el equilibrio y la simetría dental. 

¿Cómo podemos conseguir una sonrisa perfecta?

No todos nacemos con una. Por ello, tendremos que esforzarnos en conseguir una sonrisa perfecta a través del cuidado diario, cepillado, higiene y ponernos en manos de expertos para someternos a los tratamientos más avanzados de la actualidad. No todos necesitaremos los mismos, ya que algunos necesitan mejorar su alineamiento, otros la mordida y otros su coloración. 

Básicamente, los principales tratamientos para una sonrisa perfecta son:

  • Implantes dentales. Sirven para sustituir piezas dentales que se hubieran perdido, mejorando la imagen, forma y funcionalidad de la dentadura. 
  • Blanqueamiento dental. Un procedimiento que sirve para lograr que nuestra sonrisa luzca más blanca, radiante y atractiva. Los mejores candidatos son aquellos que tienen piezas dentales en perfecto orden, estado y salud. 
  • Carillas dentales. Se trata de un procedimiento muy demandado para conseguir una sonrisa perfecta. Nos permite remodelar espacios, forma, color, tamaño, simetría y alineación de nuestros dientes. Todo ello, sin necesidad de apostar por brackets u otro tipo de ortodoncia. 
  • Diseño de la sonrisa. Es, quizá, el proceso más avanzado y moderno. Nos permite crear sonrisas de forma estética y armónica, independientemente del estado de la dentadura del paciente. 
  • Ortodoncia. Se trata del tratamiento adecuado para una correcta alineación de nuestras piezas y huesos dentales. Además, también nos va a permitir corregir toda clase de problemas de mordida o diversas patologías bucodentales. Ya te explicamos hace tiempo en este mismo espacio algunas de las más importantes razones para usar Invisalign. Pásate por esta lectura. Estamos seguros que te va a convencer. 

Junto a todo esto, para conseguir una sonrisa perfecta hay algunos aspectos que podemos cuidar en nuestro día a día y que, a la larga, nos van a ayudar, como por ejemplo no fumar, no beber líquidos fríos o calientes, no consumir bebidas o comidas que puedan decolorar nuestra sonrisa o acudir a un especialista para revisiones y limpiezas profesionales.